El nuevo año empezó en casi toda España con el tiempo algo revuelto con nevadas históricas y varios temporales que han hecho que tengamos unas ganas tremendas de disfrutar de los primeros rayos de sol del año que ya nos anuncian que pronto llegará la primavera.

La Vitamina D es esencial para los humanos y por supuesto, también para nuestras mascotas, siempre en su justa medida y teniendo en cuenta diferentes factores que hacen que necesite más o menos sol.

Depende de la cantidad de calcio y fósforo que consuma en su dieta habitual, necesitará más o menos, por esto, también es muy importante que tengan una dieta equilibrada y de calidad. Así tendrá una correcta mineralización y un buen mantenimiento de huesos y cartílagos.

¿Cómo aprovechan nuestros amigos de cuatro patas el sol? Ellos absorben la energía del sol a través de su pelaje y la convierten en Vitamina D, aunque de esta manera, no les llega toda la energía que necesitan y lo que hacen es lamerse las patas y el cuerpo para así obtener la máxima cantidad posible. ¡Qué curioso!.

¿Os habéis fijado además que muchas veces nuestras mascotas aprovechan cualquier rayo de sol que entra por la ventana para tumbarse al sol? Esto es porque con estos rayos, estimula la generación de serotonina, de la conocida hormona de la felicidad. El sol les aporta mucha felicidad y algo de sueño, pues la melatonina, la hormona del sueño, les ayuda a dormir mucho mejor.

El sol además en el invierno o en temporadas más frías les mantiene calientes, proporcionándoles ese calor que necesitan. Así, si estéis pensando ya en vuestras escapadas de primavera, en nuestros bungalows con encanto pet friendly, los famosos Bungadogs, vuestros perritos estarán de maravilla disfrutando del sol y los olores en el porche del bungalow. ¡Que planazo!.

Importante resaltar que un exceso de Vitamina D puede resultar peligroso para ellos ya que puede hacer que se produzca una calcificación en los tejidos blandos. Y qué decir de los días de más calor del verano, en donde debemos protegerles de insolaciones y mantenerles bien hidratados. El sol es bueno, pero en su justa medida.

No dejar que pase muchas horas tumbado al sol o en las horas más calurosas del día, refresca a tu perrito, no le rasures excesivamente ya que los rayos ultravioleta pueden ser dañinos sin su pelaje y cuidado con sus patitas cuando hace tanto calor.

¡Con un poquito de sol y una dieta equilibrada les aportamos felicidad y estarán muy activos!